Descansa en paz

 

La cinta se inicia con un canto gregoriano o parecido ( premio del Jurado en el festival de Sudance 2024 como mejor música original) mientras un anciano fuma silenciosamente en su apartamento. El título "Descansa en paz" de Thea Hvistendalh, ya por sí solo nos introduce en el mundo del más allá o de los muertos. Estamos ante unos zombis suaves, diferentes sin excesiva sangre, porque, incluso, pueden ser creación de los vivos. Se trata de muertos muy especiales que se resisten a aguantar debajo de la tierra y los vivos, sus parientes, que se obstinan en mantenerlos en pie y limpitos de la tierra del suelo, aunque su estado de descomposición ya esté avanzado. El personaje, abuelo del nieto fallecido, vive en un lugar  oscuro, sin luz, pilla algo de la nevera que mete en una bolsa y desde una panorámica de las alturas vemos que camina por un parque. Es el padre que va a casa de su hija con la comida, ésta no quiere saber nada de él y se marcha al curro. Por lo poco que nos muestra está pasando, interpretado por la actriz

Renate Reinsve ( actriz de "La peor persona del mundo" del director Joachin Trier), el duelo por la muerte de su hijo y lo lleva como puede. La historia, sin más preámbulos, se desplaza hacia otra historia paralela a la anterior: un matrimonio con dos hijos y la madre se dispone a abordar un viaje largo por carretera. Se suceden unos hechos raros que parecen estar conectados con los recién fallecidos que toman de nuevo la escena de los vivos. Aparece una tercera historia de muertes entre dos hermanas. Así, la relación entre los zombis y los vivos se hace presente con pequeños amagos de violencia, pero sin ser sangrientos. Como si quisieran prolongar el tiempo un poquito más con los suyos.

Las escenas con los muertos se suceden sin mayores sustos ni gritos como si fuera de los más natural. Así pues, estamos ante una nueva vida de los zombis o una inmortalidad que causará el terror, pero sin sobresaltos, con naturalidad. En fin, pasa media hora y parece que nunca va a arrancar la trama con sus silencios y elipsis que el espectador completará. Eso: unos zombis más humanos y unos vivos más muertos.

Título original Andtering Av udode

Año                2024

Duración        97 minutos

País               Noruega

Dirección       Thea Hvistendalh

Guion             Idem, John Ajvide Lindqvist.

Novela            John Ajvide Lindqvist

Música            Peter Raebum

Fotografía       Pal Ulvik Rokseth

Reparto           Renate Reinsvet, Bahar Pars,

                        Bente Borsum, Bjorn Sundquist

                        Anders Denielsen Lie

                       Olga Damani, Inese Daukasta,

                      Jan Hrynkiewicz, Kian Hansen.

La panorámica desde las alturas que nos abre el director es para mostrar una zona de vegetación rodeada de rascacielos y persigue insistentemente a un anciano con una bolsa en la mano. Entra en el piso de una joven que se está pintando las uñas de los pies y no suelta palabra, apenas se miran. Ese tipo con cara de muerto ha recorrido todo el espacio y preparado la comida para que la joven le diga que comerá en el trabajo y se pire escaleras abajo. Él ya se la sopla todo e impasible se pone a papear. Son parcos en palabras y explicaciones, pero por una foto pegada en el frigorífico, un niño, la mamá y el abuelo, de tiempos pasados donde hubo felicidad. Luego, la cámara se detiene insistentemente en una habitación donde se esparcen juguetes de niño sin ver  a éste por ningún lado. La madre quiere pasar el duelo de la muerte de su hijo por sí misma sin tanta pamplina y que no la ayude nadie. Sin mediar más explicaciones entra en acción otra historia: un matrimonio donde el marido es monologista y la mujer se dispone a viajar en su coche. A partir de una llamada que él recibe y por sus caras entendemos que algo grave ha pasado. Luego vemos a su esposa muerta en una cama que posteriormente revive. Aquí es donde las dos historias se funden por medio de los fallecidos, pero cada una va por su lado sin tener ninguna conexión. Empiezan a aparecer poderes extrasensoriales venidos del más allá, por ejemplo, ventiladores que se descuelgan del techo o alarmas de coches que se disparan. Los muertos generan una energía en esa ciudad capaz de voltear los objetos por el aire. En ese estado de ansiedad, el abuelo cree que su nieto todavía sigue vivo debajo de la tierra y lo desentierra. Profanar el descanso de los muertos no será una buena idea, pues ahora los que acaban de fallecer toman fuerza y se levantan ante sus parientes. Así las cosas plantea el tema de la muerte como única salida de la vida y los que han fallecido abruptamente arrastran a la tumba, por medio de la pena, a los parientes que están vivos. Estos no aguantan la tristeza ni el duelo e intentan suicidarse. Ahora, la policía busca a los ladrones de muertos o a los muertos que se han escapado de sus tumbas, pero es una trama en vía muerta, porque pronto se abandona. Sigue con los procesos que  tienen los muertos con los vivos y qué respuesta dan en esa nueva forma de zombis mimados. No beben, no comen, son eternos y no lo necesitan.  Finalmente, genera cierta angustia de pensar que esos muertos pueden aflorar de nuevo a la vida y ver de qué forma lo hacen. Se puede interpretar como la inmortalidad o bien que los familiares se niegan a abandonar en la nada a sus seres queridos y son ellos que por sugestión los mantienen con vida. Eso: una de zombis diferente al resto.