Título original Umi yori mo mada fakuka
Año 2016
País Japón
Director Hirokazu Koreeda
Guión Hirokazu Koreeda
Música Hanaregumi
Fotografía Yutaka Yamazaki
Reparto Hiroshi Abe, Kirin Kiki,
Yoko Maki, Lily Franky,
Isao Hashizume, Sosuke
Ikematsu, Satomi Kobayaski,
Taiyo Yoshizawa.
"Después de la tormenta" del director Hirokazu Koreeda ( creador de historias de conflictos familiares
“Nuestra hermana pequeña” donde retrata las relaciones entre tres hermanas y una cuarta que desconocían o
"De tal padre, tal hijo", donde monta una trama de intercambio de hijos cuando nacieron y resulta que las familias son completamente opuestas: una pobre y sencilla y la otra de un estatus social elevado.) cuenta, en esta ocasión, como no podría ser de otra forma, una historia familiar. No es necesario pasar más de dos minutos para saber que el desarrollo de la cinta girará en torno de las pequeñas preocupaciones, recuerdos, manías de esa familia sencilla. La protagonista Kirin Kiki, nos recuerda la cinta
“Una pastelería en Tokio” de Naomi Kawase donde una anciana se hacía con una gran clientela después de cocinar una salsa de “an” excelente para rellenar los pastelillos, aquí también está pendiente de la alimentación, pero se ocupa sobre todo de realizar el papel de madre cercana a sus hijos con la sabiduría de la edad: “hay que hablar con la gente cuando está viva ( luego será demasiado tarde) o buscamos la felicidad a diario”.
Eso sí, siempre tirándoles pullas venenosas a sus hijos con un cariño pasmoso. En fin, la acción de la película es el paso de la vida en sí misma.
Año 2016
País Japón
Director Hirokazu Koreeda
Guión Hirokazu Koreeda
Música Hanaregumi
Fotografía Yutaka Yamazaki
Reparto Hiroshi Abe, Kirin Kiki,
Yoko Maki, Lily Franky,
Isao Hashizume, Sosuke
Ikematsu, Satomi Kobayaski,
Taiyo Yoshizawa.
"Después de la tormenta" del director Hirokazu Koreeda ( creador de historias de conflictos familiares
“Nuestra hermana pequeña” donde retrata las relaciones entre tres hermanas y una cuarta que desconocían o
"De tal padre, tal hijo", donde monta una trama de intercambio de hijos cuando nacieron y resulta que las familias son completamente opuestas: una pobre y sencilla y la otra de un estatus social elevado.) cuenta, en esta ocasión, como no podría ser de otra forma, una historia familiar. No es necesario pasar más de dos minutos para saber que el desarrollo de la cinta girará en torno de las pequeñas preocupaciones, recuerdos, manías de esa familia sencilla. La protagonista Kirin Kiki, nos recuerda la cinta
“Una pastelería en Tokio” de Naomi Kawase donde una anciana se hacía con una gran clientela después de cocinar una salsa de “an” excelente para rellenar los pastelillos, aquí también está pendiente de la alimentación, pero se ocupa sobre todo de realizar el papel de madre cercana a sus hijos con la sabiduría de la edad: “hay que hablar con la gente cuando está viva ( luego será demasiado tarde) o buscamos la felicidad a diario”.
Eso sí, siempre tirándoles pullas venenosas a sus hijos con un cariño pasmoso. En fin, la acción de la película es el paso de la vida en sí misma.