Año 2017
Duración 110 minutos
País Reino Unido
Director Dominic Cooke
Guión Ian McEwan
Música Dan Jones
Fotografía Sean Bobbitt
Reparto Saoirse Ronan, Billy Howle,
Emily Watson, Anne-Marie Duff,
Samuel West, Adrian Scarborough,
Bebe Cave, David Olawale Ayinde
Philiph Labey, Chistopher Scarboroug
Para captar esas sensaciones que
pueden resultar extrañas o poco apreciables hay que trasladarse a un tiempo más
allá del actual y viajar a los años sesenta del siglo pasado. En ese momento de
la noche de bodas donde asaltan las dos vidas de los recién casados como un
martillo que taladra las dos vidas. Todo ocurre en esa noche de incertidumbre, donde las sorpresas del desconocimiento pueden gastar una mala pasada. En esa noche, se repasa los momentos en que se conocieron y sus relaciones.Hablamos
de la cinta "La playa de Chesil" de Dominic Cookel.
Saoirse Ronan realiza el papel de recién casada remisa en sus primeras relaciones sexuales. Nos deleita con otro personaje espléndido, ya lo hizo en "Brooklyn" de John Crowley o "Lady Bird" de Greta Gerwing.
El tema se desarrolla a partir del desconocimiento de la sexualidad en esa época. Detrás de la cinta hay una carga tradicional de tabú hacia el sexo que se va desmembrando a lo largo de la película.
Saoirse Ronan realiza el papel de recién casada remisa en sus primeras relaciones sexuales. Nos deleita con otro personaje espléndido, ya lo hizo en "Brooklyn" de John Crowley o "Lady Bird" de Greta Gerwing.
El tema se desarrolla a partir del desconocimiento de la sexualidad en esa época. Detrás de la cinta hay una carga tradicional de tabú hacia el sexo que se va desmembrando a lo largo de la película.
Evidentemente si no nos ponemos en
situación no entraremos en el juego de represiones de incertidumbre ante un
momento que resulta un tanto especial: esa noche donde se piensa o se cree que
se va a descubrir las delicias del matrimonio. De un momento esperado durante mucho
tiempo y que llega con esas sensaciones extrañas de perder la virginidad de no saber
como acabará la noche o de dónde les llevará esa noche tan especial. Es cierto que la pareja se quiere con locura, se ama,
pero pasar esa raya del amor y conseguir que el sexo iguale o supere lo
conseguido hasta entonces parece imposible. Por lo menos, hay en el ambiente una sensación de
inexperiencia y de temor que agarrota las entrañas de los protagonistas.Están tan atenazados que no pueden expresar en la cama el amor que se tienen fuera de ella. La
noche de bodas sirve para darle un repaso a las dos vidas de los protagonistas
hasta que han llegado aquí. Hasta este momento,el amor es insuperable: son uno para el otro. Pero ahora falta pasar esa barrera del amor idílico y
cruzarla con el amor sexual y ahí parece que se detiene que no saben como
iniciarse: no avanzan. Les cuesta una eternidad desnudarse físicamente en ese momento, conocerse en otro campo diferente donde parece que naufragan. Mientras la historia avanza lentamente mostrándonos el pasado de cada uno. La resistencia, por parte de ella, está en cruzar una línea invisible para realizar ese acto tan esperado
por él. Ahí se crea una tensión argumental. El deseo de él y la espera de ella
generan un pequeño paréntesis, una confusión. En definitiva, ese estado de deseo, durante tanto tiempo, que no se realiza generará dudas. Si no se cruza esa relación invisible, la relación puede romperse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta página