The Florida Project

Título original The Florida Project

Año                 2017

Duración         115 minutos

País                Estados Unidos

Dirección        Sean Baker 

Guión              Sean Baker, Chis Bergoch

Fotografía        Alexis Zabé

Reparto           William Dafoe, Brooklynn Prince,

                        Bria Vinaite, Caleb Landry Jones,

                        Mela Murder, Valeria Cotto, Chistopher

                        Rivera, Macon Blair, Sandy Kane,

                        Karren Karagulian, Lauren O'Quin, 

                        Giovanni Rodriguez, Carl Bladfield. 

La historia de "The Florida Project" de Sean Baker ( director de "Tangerine" aquella cinta que sigue los mismos pasos que esta: protagonistas encerrados en su mundo de suburbio donde la droga, prostitución y los personajes perdidos en un mundo de desolación vagan sin rumbo) se inicia en un

 motel de carretera de la periferia  norteamericana y unos insultantes e impertinentes críos escupiendo a un coche recién llegado. A primera vista, los mocosos parecen moverse con total libertad y en medio de la selva, no les importa insultar y maltratar al conductor que aparece por allí. 

Es más, lo buscan con intensidad, con ansiedad como un deseo de fieras con ganas de atacar una presa, sin el menor respeto hacia el adulto ni de las repercusiones que puedan tener posteriormente. Sin embargo, cuando nos asomamos a su mundo, a su nido y descubrimos la procedencia de los infantes ya todo nos parece normal.  Los desvergonzados saltan patios, verjas, ventanas,  sin nada que les detenga hasta llegar a su escondrijo, allí donde el adulto les pueda salvar. Un adulto excesivamente joven y perdido en su mundo cutre como para preocuparse en esas nimiedades. Nos encontramos en un motel de carretera donde el gerente

Willem Dafoe ( nominado al Oscar 2018 como mejor actor de reparto) bastante tiene con solucionar las desgracias que les causan los mocosos que andan sueltos por su recinto.

El sueño americano no ha llegado a todos los rincones, sino que se ha quedado solo en los más privilegiados, el resto deambula en un ambiente de miseria. Ese sueño, arrastra a los niños de infancia perdida. Ladronzuelos que se las ingenian para conseguir comida, helados o lo que sea aunque para ello mendiguen a los transeúntes. La crisis llega a todos los rincones del planeta incluso el país más rico del mundo que sufre sus consecuencias: familias con la casa a cuesta y los niños de un lugar a otro. Así pues, el hilo conductor de la historia son los mocosos que campan por el motel a sus anchas esperando que llegue el nuevo de turno despistado y sin saber dónde se mete para birlarle la pasta. Reclutan en sus filas los mozalbetes que llegan de nuevo. Están preparados para ver qué pueden conseguir o con qué putada divertirse. Siempre al acecho como salvajes alerta de la llegada de la presa. Por lo tanto, la historia pasa de trastada en trastada, de gamberrada en gamberrada sin que nadie ose parar los pasos de las pequeñas bestias. Sin embargo, la inercia viene dada por la maestría de los adultos que son de quienes han tomado las ideas: madre separada y prostituta acostumbrada a ganarse la vida como pueda, ya sea en la cama o en otros menesteres turbulentos que le dé para vivir el día a día.Por lo tanto, la subsistencia diaria son los constantes robos y timos al personal de la zona. En definitiva, en esos moteles de historias paralelas donde se desenvuelven los mozalbetes suceden tantas desgracias paralelas que las de los niños son una más en su entorno y hacen un juego de la propia situación. El único que puede volverse loco ante tanta adversidad puede ser el pobre dueño que ya no puede retener más su paciencia. Un pequeño apunte: estos niños de adultos ya no se sabe lo que van a hacer ni dónde son capaces de llegar. En el fondo son reflejo de los adultos sin infancia y perdidos en su vida futura. Así, estos llevan el mismo camino que sus progenitores.