Outsider

Título original L'outsider

Año                2016

Duración        117 minutos

Director          Chistophe Barratier

Guión            Chistophe Barratier, Laurent Turner

Música          Philippe Rombi

Fotigrafía      Jérome Almeras

Reparto        Arthur Dupont, François-Xavier

                    Demaison, Sabrina Ouazani, 

                    Tewfik Jallab, Thomas Coumans,

                    Sören Prevost, Franz-Rudolf Lang

                    Luc Schillz, Sophie-Charlotte

                    Husson, Roby Schinasi.

El mundo de los brokers está muy contado, ya que es un lugar ( por desgracia se ha llevado por delante a los más desprotegidos que confiaban en dejar sus ahorros en fondos trampa)  de vividores que especulan con acciones y humo, mucho humo. Ahí está 

"El lobo de Wall Street " de Martin Scorsese ( mejor película , mejor director y hasta mejor actor en los Oscar 2013 donde un excelente DiCaprio da vida a un ejecutivo pasado de rosca que con tal de ganar pasta usa todas sus artimañas) donde el cachondeo, la coca y las chicas de alterne son los recursos para hacer frente al estrés  o  

"Margin Call "de J.C.Chandor donde los tiburones financieros se comen todo lo que se pone por delante. En esta ocasión "Outsider "de Chistophe Barratier ( aquel director que creó la magnífica "Los chicos del coro" de un grupo de chico internados que destacan las relaciones humanas entre un profesor y los adolescentes) intenta emular esa misma situación de desespero ante la necesidad imperiosa de hacer pasta a toda costa. Aquí también buscan desintoxicarse del desenfreno con el cachondeo incesante entre los colegas. Interpretado por 

Arthur Dupont que da vida a un manipulador  de las finanzas

La película gira en torno a Jerone nuevo bróker que ha tenido que pasar por las putadas de sus colegas hasta llegar a la cima. Las juergas de alcohol y sexo son las que les privan del ataque al corazón por su trabajo al límite. Triunfar con la guita no te quita de pasar por el trago de la vida: el rechazo de las mujeres, los palos de las enfermedades o la muerte de tus familiares. Eso debía ser lo que te da perspectiva más allá del dinero que es humo. Ocuparse todo el tiempo en el mundo de las finanzas de la Bolsa sin pararse a emplear un rato en los tuyos tiene la cruel venganza de que cuando los pierdes para siempre ya no hay solución ni vuelta atrás. Seguimos con indiferencia a ese personaje que triunfa y vive al límite de sus posibilidades que, en definitiva, no deja de ser un desgraciado más del sistema que te empuja a cumplir unas expectativas y te absorbe el cerebro para, al final, machacarte sin compasión. Así pues, se trata de un ser materialista y  deshumanizado: un individuo que siempre se preocupa por el dinero y  descuida los puntos humanos más sensibles y, por tanto, carece de sentimientos.