domingo, 12 de enero de 2020

Ojos Negros




Título original Ojos Negros

Año                 2019

Duración          65 minutos

País                 España

Dirección         Marta Lallana

Guión              Marta Lallana, Ivet Castelo

                       Iván Alarcón, Sandra García

Música           Raül Refree

Fotografía      Jorge Basterretxea

Reparto          Alba Alcaine, Julia Lallana, 

                      Anna Sabaté.

                
La cara triste de una adolescente, con el rostro serio. Una voz de fondo resalta una conversación. Hablan de pasar unas vacaciones. Ella, protagonizado por

Alba Alcaine, está en medio del discurso de la disputa de la pelea que se debate al fondo en otra habitación. La conversación se va encendiendo, solo la cara de la adolescente que va cambiando conforme sube el tono de la pelea. Hablan y hablan sobre las vacaciones y dónde cuándo y cómo van a dejar a la chica que más bien parece una mercancía que una hija.Que se quede con mi madre, no, tantos días, pues con la abuela. Hasta que asoma una lágrima que corre por la cara. 

Ese imagen es el inicio de "Ojos negros" película de Marta Lallana que recuerda, en parte, el destino de una adolescente en verano, por causas que desconocemos como sucede en esta ocasión, ajenas a la persona adolescente, como ocurre en en "Verano de 1993" de Carla Simón.Cuenta esos detalles del verano de una adolescente en un pueblo de la montaña.



Una joven, acostumbrada a su mundo urbano, se encuentra en un pueblo rural, llamado Ojos Negros como la película, de Teruel, porque  a sus padres les interesa que pase unos días con la abuela y su tía que reclama su visita después de no verla durante muchos años. El ambiente rural y la frialdad de la abuela, con la cual que no se han visto durante años marca una frontera de hielo. No hay comunicación y las caricias son fingidas. Las conversaciones son de circunstancias sin sentido, por decir algo. El tiempo no pasa o ,como mucho ,pasa lento. Todo resulta extraño, muy lejano de la sensibilidad de la adolescente. La ambientación rural juega un papel importante como si fuera un personaje: las moscas que vuelan rondando los alimentos, las gallinas que campan solas. Todo es nuevo para ella y se debe a la nueva disciplina de su tía. Con el paso de la película, vemos los juegos, las costumbres de bandas de música y procesiones en las fiestas del pueblo. Y sigue la acción con hacer amigos, bañarse en el río.Pronto se hace con una amiga que juegan en el campo a hacerse mayores y se cuentan sus problemas, sus cosas. En definitiva, el hilo conductor es el de la adolescente en un mundo rural y con gentes donde no está acostumbrada a pasar. Se marcan tres etapas claras: la inocencia, aquella de descubrir el mundo; la segunda, muestra la tía y sus relaciones con un chico del pueblo, a una edad que ya ha pasado la euforia juvenil, justo donde empieza el declive y ,para finalizar, la tercera, en la abuela, esa etapa donde la anciana pide a la nieta que vuelva el año próximo con una mirada muy lejana, tanto que se duda en esa cara que pueda llegar su cuerpo en vidas hasta tan lejos. Como fondo se encuentra la amistad de la infancia que se va perdiendo de forma se deja esa inocencia para pasar a ser un adulto con malicia y problemas. Detrás de los ojos negros hay un mundo perdido de comunicación y de sensibilidad por vivir. Una nueva vida está al caer.

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