El niño que domó el viento

Título  The Boy Who Harnessed the wind.

Año                 2019 

Duración 113 minutos

  

País                 Reino Unido

Dirección         Chiwetel Ejiofor

Guión              Idem ( libro William Kamkwamba)

Música            Antonio Pinto

Fotografía       Dick Pope

Reparto          Chiweter Ejiofor, Maxwell Simba,

                       Joseph Marcell,  Aissa Maiga,

                       Noma Dumezweni, Lily Banda,

                       Lemogang Tsipa, Kelvin Maxwell,

En una de las primeras tomas aparece 

Chiwetel Ejiofor, actor y director de "El niño que domó el viento",  nos recuerda a "12 años de esclavitud" de Steve McQueen película donde se narraba las peripecias del hombre de bien devuelto a la esclavitud por ser de color.

 Esto ya nos lleva a una posición de esperar varias desgracias o un drama de lo más seco. No nos equivocamos, porque veremos la miseria que se ceba con el pueblo africano. Cuenta una historia verídica de William Kamkwamba,niño, interpretado por Maxwell Simba,

 de familia humilde que vive en un pueblo rural de Malaui situado entre Zambia y Tanzania. Se centra en las calamidades para subsistir con la cosecha anual. Eso yendo unas condiciones buenas de cosecha, pero cuando llega la sequía, entonces la miseria ya no llega ni para comer. Estamos ante un hecho real que ha pasado sobre los cuerpos de personas y esa es la verdadera crueldad del relato.

La historia gira en torno a una familia sin recursos en África, como muchas de  ellas. El dinero no llega siquiera para escolarizar al niño de la familia, el cual tiene siempre ilusión por aprender y sacar buenas notas. Siempre está detrás de los inventos que den mayor renta a las casas. Anda en el vertedero donde puede rescatar chatarras para sus inventos.Los padres con los ingresos de la agricultura no pueden pagar los estudios de su hijo, el cual no consigue estudiar porque cuando se acaba la luz solar no puede encender la luz de queroseno. Por otro lado, las condiciones de trabajo son de lo más rudimentarias, su padre siembra durante un diluvio con un palo como única herramienta para clavar las semillas en el terreno. Aguanta el aguacero y sigue con la siembra para que el grano tenga mayor frescura en su raíz. Mientras, el hijo del clan es un manitas de la electrónica, pues cuando faltan pilas para oír la radio se las arregla para conseguir que funcione. Llegan años de inundaciones y le siguen las sequías, con lo cual se consigue un desierto en esa la tierra, de tal manera que no hay quien siembre nada. En ese panorama de hambruna que se cierne sobre sus cabezas está el político que pide el voto para su candidatura, pero siempre con lealtad sin críticas. Es decir que si se levanta una sola voz contraria al jefe del estado solo por pedir ayudas la paliza estará asegurada. La película sigue por la miseria de las cosechas y eso acarrea más desastres. Ante tanta miseria, lo poco que tienen se lo van a robar. El panorama futuro es desalentador, pues no hay nada para hoy y menos para mañana. Las revueltas por conseguir el preciado maíz que reparte el gobierno causa disturbios y guerras por conseguirlo. Las decisiones que se toman en esa situación son desesperadas y puede que desacertadas. El chico no desiste en su intento de generar agua por medio del viento una dinamo y poco más para ello necesita la bicicleta de su padre que lo tiene imposible para que se la dé. En definitiva, una película de supervivencia muy dura, pero seguramente no tanto como la realidad.Necesaria ante el derroche de los mandatarios de los países consumistas y los consumidores  que son incapaces de mirar más allá de sus narices.