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 Título original Broker

Año                 2022

Duración         129 minutos

País                 Corea del Sur

Dirección          Hirokazu Koreeda

Guión                Hirokazu Koreeda

Música              Jung Jae-il

Fotografía         Hong Kyung-pyo

Reparto             Lee Ji-Eun, Bae Doona,

                          Song Kang-ho, Gang Dong-won,

                          Lee Joo-young, Bek Hyun-jin,

                          Ryu Kyung-Soo, Kang Gil-woo,

                          Song Sae-byeok, Park Hae-jun.

"Broker "de Hirokazu Koreeda ( creador de "Un asunto de familia" también abordaba el tema de la adopción de una niña; "Nuestra hermana pequeña", sobrevuela el mismo tema de conocer a una hermana después de pasados varios años; "De tal padre, tal hijo", seguía con el mismo tema de los bebés, pero en este caso había un intercambio de niño posteriormente al nacimiento, por confusión, y , pasados los años, cuando ya estaban acostumbrados a unas normas, en cada familia era muy diferente, pues tenían un  estatus social diferente. Deben cambiarse los niños después de pasar unos años y esto genera problemas de adaptación). Sus películas contienen siempre una carga importante de humanidad, por muy crueles que sean las historias.En este caso, una madre que deja abandonado a su hijo en la puerta de una iglesia, el día siguiente se arrepiente y quiere recuperarlo. Sin embargo, dentro hay personas que rescatan al niño para buscarle un hogar y con ello ganar una pasta de recompensa. Uno de los personajes que se obstina en convencer a la chica que el día siguiente llega muy agobiada es

Song Kang-ho, personaje que hacía de  taxista de la casa de ricos en la premiada "Parásitos", de Bong Joon-ho que le aconsejan que es mejor darlo en adopción a una familia acomodada, antes que dar tumbos con ella por esas calles. Contesta que no tienen derecho, pero le amenazan con denunciarla por abandono. Es curioso que los traficantes tienen más traza a la hora de cambiar los pañales que la propia madre. 

Más tarde entran en acción dos policías que siguen el rastro y luego aparece un asesinato en el que está involucrada la desesperada madre.

La trama central se ramifica en pequeños sucesos que les pasa a los personajes fuera del secuestro, es decir, tienen otra vida que les afecta al mismo tiempo que el secuestro. Bueno, del estilo de Koreeda con pequeños detallen que a veces se hacen grandes.

Esos dos chanchulleros que han rescatado el niño de la iglesia pretenden entregarlo a una familia acomodada y sacar una buena tajada. Por eso, convencen a la joven madre que se olvide de su hijo que ellos le solucionarán le vida para siempre. Le explican las intenciones y que lo más probable, siendo niño, es que se pague un buen pellizco, la cual cosa parece que le abre los ojos a la madre o la calma un tanto porque piensa cobrar también ella un buen dinero. Sin embargo, los traficantes de niños son observados de cerca por dos mujeres que son policías, un tanto blandas en su carácter para ser policías, que siguen la pista de cerca para atraparlos. La tapadera es un taller de tintorería, donde cosen y aparentemente atienden a clientes. En la primera entrega del niño no funciona porque los padres quieren comprarlo a la baja y a plazos como si se tratara de un electrodoméstico. La pasma quiere pillarlos con las manos en la masa. Después del fiasco del comprador, esperan a otro cliente en casa de unos parientes, pero deben camuflar al niño haciéndose pasar por una pareja de padres. La historia avanza lentamente dentro de esa furgoneta destartalada mientras se van contando aspectos de su propia vida. En esa unión temporal, se crean vínculos de amistad entre los personajes. Ahora, las policías que los persiguen preparan una trampa con unos compradores falsos con micros incorporados a sus cuerpos para detener a los estafadores. La operación no cuaja y siguen su ruta. Van pasando anécdotas graciosas en ese grupo familiar impostor, porque se ha unido, sin que ellos se enteraran, otro niño  del domicilio que dejaron atrás. Con esas historias que cuentan, esa pareja de impostores se hacen entrañables. En ese deambular de aquí para allá, las vidas de los personajes muestran sus debilidades personales . Así pues, por las costuras de la trama principal se cuelan detalles de las vidas personales de su intimidad. Posteriormente, la trama se complica, pues aparece involucrado en la muerte del padre del niño por la propia madre y ese padre  está casado. La viuda manda a unos matones para recuperar a su hijastro porque pretende criarlo. Esa familia que empieza postiza, toma tintes de realidad, intentan o proponen ser familia de verdad. En definitiva, está cargada de pequeños detalles que agrandan esa sensación extraña de que no pasa nada y que el tiempo sucede con lentitud.