Año 2015
País Lituania
Director Alanté Kavaïté
Música Jean-Benoït Dunchel
Fotografía Dominique Colin
Reaprto Julija Steponaityte, Aiste Dirziute, Nele
Savicenko, Laurynas Jurgelis, Salkauskaite
Inga, Martynas Budraitis, Gaile Butvilayte,
Jurate Sodyte.
"The summer of
Sangaile" de Alanté Kavaïté ( película seleccionada por Lituania para
acceder a los Óscar del 2016, pero se quedó por el camino como otras
tantas) cuenta la relación amorosa
entre dos adolescentes de corta edad.
Sangaile es una joven que no lo tiene claro a la hora de elegir la pareja
que más le conviene entre un chico o una chica. El dilema solo dura el tiempo
en que se da cuenta de que le atrae una chica que acaba de conocer en una
demostración de acrobacia de avionetas. La película no descubre nada nuevo y
recuerda, salvando las diferencias, a "La vida de Adéle" de Abbdellatif Kachiche.
Las dos películas mantienen una temática parecida de indecisión hacia el tipo de amor
que se deben decantar.
La temática de la cinta pasa por
experimentar con jóvenes de diferente sexo y ver cuál es el que más interesa. Las sensaciones que obtenga marcarán la decisión para enrollarse con un joven o una joven de tu propio sexo. Las juergas se suceden con un
final de experiencias sexuales. Es una edad incierta, del pavo, donde no se es adolescente ni
adulto, donde las indecisiones asaltan a la joven en tumulto. Sobre todo, la
familia, que no ayuda en nada hacia la decisión, se mete donde no le importa con tal de importunar y hablar más de la cuenta. El personaje se tropieza con un camino de dudas sin saber por dónde tirar. Solo le apetece
estar con su nueva compañera acercarse a ella en la intimidad, invadir su
habitación que parece un santuario, un museo cargado de sugerencias. En esa
guarida experimentará el deseo hacia el sexo. Una pasión extraña y de un pudor
a la desnudez, delante de su amiga, que implica una atracción irresistible. Las
dos se sienten cómplices de una situación embarazosa y difícil. No está muy
claro que desee dar el paso ahora mismo, pero sí para preparar un camino de placer que
se hace necesario entre las dos. La película avanza con planos de fotografías
sugerentes de sensaciones sensuales que quieren ahondar en los preliminares de
una relación sin marcha atrás. Sienten una atracción especial, pero son
incapaces de dar el paso de tirarse una encima de la otra y expresar aquello
que les pide el cuerpo por dentro. Las imágenes se recrean en una especie de
indecisión, sin embargo, su hipnotismo es muy evidente. La pareja muestra una
complicidad en sus actos y se intercambian acciones que una realiza y la otra le acompaña. Finalmente, las imágenes son una expresión de su estado
trasparente, pausado, de campo, de libertad. Como si se hubieran tomado un chute
de amor en grandes dosis y se encontraran drogadas por ese amor repentino. Extasiadas de amor se funden en una relación sin fin. Pese a todo, como cualquier
pareja, mantendrán una crisis de identidad que las apartará por un tiempo.
Restaurar las heridas causará otros momentos de satisfacción como si fuera el
principio de la relación. La atracción a las alturas es una demostración de la
búsqueda de la libertad y parece que por fin se ha conseguido.
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