Deathgasm

Título original  Deathgasm

Año                 2015

Duración         86 minutos

País                Nueva Zelanda

Director           Jason Lei Howden

Guión              Jason Lei Howden

Fotografía       Simon Raby

Reparto           Milo Cawthorne, James Blake, Kimberley

                       Crossman,  Sam Berkley, Daniel Cresswell,

                       Delaney Tabron, Stephen Ure, Colin Moy.

"Deathgasm" de Jason Lei Howden busca en todo momento encontrar ese espectador  que se quede embobado delante de la cámara ante el Heavy metal total, el gore sangriento y unas gotas de amor para marcar la pausa y respirar. Busca el revoltillo ideal para que el personal que está en la sala no salga de estampida antes de terminar la proyección. A todo esto, se supone que los que asisten a la sala y empiezan a verla ya saben a qué atenerse. Así las cosas, conforme avanza la película nos asaltan a la imaginación escenas ya vividas anteriormente en otras películas: las imágenes del heavy Santiago Segura mientras disfruta con el rollo musical antes que preocuparse por la vida como le sucedía en (1)"El día de la bestia" de Álex de la Iglesia, al mismo tiempo recordaba a las invocaciones diabólicas con la aparición del anticristo ( el diablo aparece de forma diferente: una por una canción, himno oscuro, la otra por un cura obstinado en unas combinaciones rocambolescas a través de un brujo televisivo), eso sí, dándose de hostias en las dos, en una con la mano, una figura o un fusil; en ésta con un consolador. Por la sangre y los cuerpos descuartizados te recuerdan a (2) "Rec 3" de Paco Plaza,

 donde el mordisco de un perro rabioso producía unas transformaciones en el humano de lo más raras y causaban talas humanas ( si, si, cortes del cuerpo humano con el motor sierra a mano) y sangre a raudales. En la peli que comentamos, los sucesos llegan desde una visión de unos adolescentes que están de vuelta y que se las suda todo. Lo dicho, me quedo con las películas nombradas anteriormente y me voy a verlas antes de seguir con este tostón.

La película se inicia con un chico, Brodie, recién llegado a casa de sus tíos porque a su madre la han internado en un manicomio por haber realizado una animalada. Los familiares son completamente diferentes a él ( modositos y religiosos), en cambio él irrumpe en sus mundos desde otra óptica, pues viste a la heavy metal ( chupa, guitarra y pelos a lo loco) y no lleva intenciones de cambiar. Esta posición le acarrea enemistades y distanciamientos hasta que consigue encontrar un colega y montan un conjunto musical. Hasta aquí todo normal, ( ya ha pasado media hora con todas estas presentaciones y sin un amago de sadismo sangriento) y te preguntas dónde está la sangre que dicen que emana a borbotones. En ese momento dan con una partitura musical que resulta ser una canción satánica, la cual, en cuanto la tocan, los humanos salen poseídos de un mal extraño y salen disparados de sus casas vomitando sangre por todos los costados. A todo esto hay una banda satánica que quiere recuperar el manuscrito. En fin, la película es carnicera porque se suceden descuartizamientos con espada y sierra mecánica, corte de brazos cabeza y tronco; y sangre toda la que quieras, pero, el guión es simple, la verdad, un auténtico coñazo.  

(1)

(2)