Under The Shadow

Título original Under the Shadow

año                 2016

Duración         84 minutos

País                Reino Unido

Director          Badak Anvari

Guión             Badak Andavi

Música           Gavin Cullen, Will McGillivray

Fotografía      Kit Fraser

Reparto          Narges Rashidi, Avin Manshadi,

                       Bobby Naderi, Ray Haratian,

                      Arash Marandi, Bijan Daneshmand,

                     Sajjad Delafrooz, Nabil Koni, Hamid

                    Djavadan, Behi Djanati Atai, Amir 

                   Hossein Ranjbar, Soussan Farrokhnia




La película se sitúa en un contexto de horror diario por la caída de bombas en tu propio techo. Por eso, difícilmente puedan asustar a los protagonistas unos ruidos de unos espíritus que danzan por la casa.

Estamos en Teherán en el año 1988 metidos en plena contienda bélica entre Irán e Irak, este último ha aprovechado un momento débil de cambio de régimen ( el Sha Reza Pahlevi se ha ido por piernas y deja su sillón a Jomeini) por medio de Saddam Hussein, el cual que no tendría un futuro muy esperanzador) para apropiarse de una parte del territorio iraní. Ante este panorama, pensamos que el terror ( porque nada hace pensar que pueda superar el pánico de una guerra sobre sus cabezas) nos va a llegar de alguna masacre indiscriminada por parte de algún asesino de turno, pues no, nada de eso ocurre.  Puede pasar que se introduzca en tu casa un Djinns maligno ( una especie de genio o de fantasma con muy mala baba) que cause más dolor todavía que la propia guerra. Eso ocurre en "Under The Shadow" de Babak Anvari donde se ceba el mal dentro de una familia rota por la guerra.

 Allí una hija y su madre se verán atenazadas de abandonar la ciudad a causa de el demonio que les acecha.

La película empieza con la represión ( por parte de la administración) de una mujer porque no la dejan continuar la carrera  de medicina ( deseo que prometió a su madre antes de morir). Sin embargo, el régimen político considera que puede continuar, ya sea por su pasado rebelde o solo por su condición de ser mujer. Esta frustración lleva al seno familiar un mal rollo. Por si fuero poco, el marido no puede escaquearse de ir a primera línea del frente de guerra. Los misiles hacen su aparición en el edificio y con ellos, por si no era suficiente, llega un ser extraño y maligno. La desaparición de la muñeca de la niña impide que huyan de la ciudad a zonas más seguras, pues la niña no lo hará sin su muñeca. Aquí es donde empieza el baile del mal, o de sábanas en forma de fantasma que caminan y vuelan por la casa. Las apariciones del espíritu, que ha tomado la muñeca como arma de posesión, son constantes. Pese a que la protagonista es incrédula de estas historias y bastante tiene con las bombas que pueden caer sobre su cabeza, no deja de agobiarse ante la situación de no poder emprender camino hacia un lugar más seguro. Los fantasmas y la tensión hacen mella en los cuerpos desesperados de los protagonistas. En definitiva, hay tensión, sustos, apariciones fantasmales sin que asome una gota de sangre. Pues eso, una gama de sustos de sábanas fantasmales corriendo al viento. Bueno.