viernes, 13 de abril de 2018

Alma mater





Título original  Insyriated

Año                 2017

Duración          87 minutos

País                 Bélgica

Director            Philippe Van Leeuw

Guión               Philippe Van Leeuw

Música             Jean-Luc Fafchamps

Fotografía        Virginie Surdej

Reparto            Hiam Abbass, Diamand Bou Abboud

                         Juliette Navis, Mohsen Abbas. 


La película "Alma Mater" ( película muy premiada con el premio del Público en el Festival de Berlín 2017, Festival de Sevilla y otros) de Phileppe Van Leeuw muestra esa zona del mundo devastada por la guerra y el hambre. Lugar inhóspito donde malviven seres humanos con la incertidumbre de que un francotirador te pegue un tiro si asomas la cabeza por la ventana, morir de sed o hambre dentro de tu propia casa. A todo esto, si los adultos tienen problemas para salir ilesos qué será de los ancianos y de los bebes. Estamos ante una guerra permanente sin saber bien qué pasa ni para qué sirve ( como todas ellas): disputa del poder, odios innecesarios. 

Esas Guerras civiles que solo dejan muertos en las cunetas (en este caso, en el país de Siria, llevan casi medio millón). La desolación de un territorio y el abandono de los habitantes por el riesgo de morir ( casi cinco millones de personas salen del país en busca de paz, pero que son rechazados por los países del confort). Ciudades enteras devastadas: Alepo, por ejemplo, asolada por las ruinas de los bombardeos continuados. La guerra se ha fraccionado en varias guerras, pues los opositores de Asad , el presidente, luchan entre sí para tomar el control de la contienda. En medio, las grandes potencias, Rusia y Estados Unidos, financian armas a saco, pero ese tráfico de armas  puede caer en los fanáticos fundamentalistas con recursos para realizar atentados. 

En esa situación de pánico viven aquellos que desafían a la muerte. Allí se desarrolla la trama de la cinta actual como la despedida de la vida. En fin, un drama donde la vida vale poco menos que nada.







Los personajes se sienten acosados, retenidos en sus casas por miedo a recibir un tiro del tipo que está apostado en la azotea con el oficio de acertar el punto de mira en un cuerpo que se mueve por la calle.Los habitantes deben huir de su lugar porque ya no hay seguridad. La cinta plantea cómo escapar de esa situación. El hecho de huir de tu propia casa no resultará tan sencillo, pues supone un riesgo elevado: perder la vida. Ese temor traspasa más allá de la pantalla. Ese miedo te invade el cuerpo. Sientes en tus carnes el dolor que sufre esa gente cuando cruza la puerta de salida, pues el francotirador está apostado en la pared, sin prisa, contempla el paso del tiempo y con el único plan que cargarse a todo aquel que se mueva, no preguntará de qué lado está, su función es matar. Cuando esto ocurre, ¿se puede seguir viviendo con el fiambre del familiar tendido y malherido en la calle? La trama pasa por silenciar al resto de habitantes de la casa ese hecho puntual, al mismo tiempo, se suceden altercados violentos que afectarán la convivencia de los personajes en esa casa. ¿Se puede hacer una vida normal con los obuses sonando en el comedor de la casa? La respuesta es que no, pero ellos no tienen más remedio que vivir con los cuerpos pegados a una pared, pero la muerte acecha pegada a sus oídos. ¿Cuántas posibilidades hay de que una de esas bombas aterrice en sus propias narices y acabe con el drama?¿ Acaso no será la solución definitiva?¿ Merece la pena vivir así? Acaso no son demasiadas preguntas sin respuesta, sin solución, pues vivimos de espaldas a estas realidades. Mientras las bombas les acechan, los rebeldes se acercan y por mucho que se amontonen en la cocina se oyen llegar sus verdugos, se aproximan piso a piso. ¿Se puede seguir viviendo ni un minuto más si se sabe que la muerte está cerca, al otro lado mismo?¿ Cuantos fueron que se quedaron con las maletas hechas y el cuerpo tendido al lado.?En definitiva, demasiadas preguntas para tan pocas respuestas con soluciones en un país en guerra que no se salva nadie de la violencia y la barbarie.

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