En cuerpo y alma

Título original A trestol és a lelekro

Año                 2017

Duración         116 minutos

País                 Hungría

Director           Lldikó Enyedi

Guión              Lldikó Enyedi

Música            Adam Balazs

Fotografía       Maté Herbai

Reparto           Morcsanyi Géza, Alexandra Borbely,

                        Ervin Nagy, Pal Macsai, Júlia Nyakó,

                        Tamàs Jordán, Gusztàv Molnar, István

                        Kolos, Annamária  Fodor, Itala Bekés,

                        Vince Zrinyi Gal, Attila Frinz.

   
"En cuerpo y alma" de Llidico  Enyedi ( ganadora del Oso de Berlín 2017 y competidora a los Óscar como mejor película extranjera, pero se ha quedado en el camino) explora las posibilidades del amor entre una inspectora cárnica de un matadero de reses y el jefe de la empresa. La frialdad y la distancia entre los dos personajes será una barrera difícil de franquear.El tema central es la relación de la pareja con diferentes trabajos. Todo ello desde la distancia y  al mismo tiempo contemplamos la barbarie del momento en que sacrifican a una vaca. Se hace con pleno detalle, desde el momento en que entra, con esos ojos perdidos hasta que unos minutos después es seccionada la cabeza del cuerpo mientras un chorro ingente de sangre cae al suelo, con su posterior proceso de descuartizamiento.

 La cinta sigue a esos dos personajes que se quieren en la distancia en los sueños: Morcsanyi Geza y Alexandra Borbely.

Dos vidas diferentes separadas con puntos distantes que intentan acercarse, amarse. La distancias se hace larga complicada. Las primeras imágenes muestran soledad y silencio, dos cuerpos herméticos que no sabemos si al final se van a abrir. Ambos se estudian como si se tratara de una partida de ajedrez. No van a dar el paso de acercarse a las primeras de cambio. Tienen una edad avanzada y se sienten con ganas de asegurarse el movimiento. En cuanto al tema laboral, los métodos de la nueva inspectora son demasiados estrictos y pronto chocarán con el gerente, ya que cada uno mira por realizar su trabajo para beneficiarse: el negocio uno y para ceñirse a las normas el otro. A veces, esa relación hermética, en la distancia puede que se acerque en los sueños. Los sueños coinciden en las apetencias. Se ven en la fantasía. Allí son animales en libertad en plenitud de felicidad, pero en la realidad la relación no acaba de consolidarse. Pese a que lo desean intensamente sienten un muro delante de sus cuerpos. Por lo tanto, en sueños consiguen aquello que no pueden en la realidad: ellos son dos ciervos que campan juntos en libertad por la montaña nevada. No mantienen relación alguna pero corretean por los arroyos en busca de comida. Llegan a un punto que les atrae más la relación salvaje, en sueños que la real, pues mantienen más cosas en común y disfrutan más con ello. Sienten libertad, amor y placer solo cuando se distancian de sus cuerpos sólidos y cargados de humanidad. En definitiva, la cinta gira y gira en torno del mismo tema: la soledad y la apatía por la vida.