Wonder Wheel

Título original Wonder Wheel

Año                2017

Duración        101 minutos

País               Estados Unidos

Dirección        Woody Allen

Guión             Woody Allen

Fotografía       Vittorio Storaro

Reparto           Kate Winslet, Justin Timberlake,

                        Juno Temple, James Belushi,

                        Jack Gores, Max Casella, Michael

                        Zegarski, Tony Sirico, Marko Caka

                       Dominic Albano, Evin Cross  

Reconozco que las películas más aburrida de  Woody Allen ( si tiramos año tras año hacia atrás vemos que todas están muy bien: 

"Café society", 

"Irrational Man", "A Roma con amor") 

son mucho más entretenidas que la mejor película de otros directores. No creo que sea el caso de "Wonder Wheel "porque cuando 100 minutos de cinta se te pasan en un relámpago quiere decir que detrás está la mano de un artista de la creación de séptimo arte. No esperemos una perla como "Mach Point "quizá se parezca más a "Blue Jasmine" donde el juego de golpes familiar mantienen ciertos parecidos. Los personajes se embroncan como si estuvieran en un escenario teatral. 

Kate Winsley ( es como ver de nuevo la Cate Blanchet de Blue Jasmin) y 

James Belushi realizan el papel de esposo en un matrimonio de los años cincuenta dentro de un ambiente de feriantes. Estos contienen ese toque personal de diálogos cortantes, directos al cuello. El espíritu y la sombra del director es un ente que circula en los escenarios sin que él aparezca en pantalla, pero da la sensación de impregnarlo todo con ese estilo muy personal.La obra de Allen, en general, es excelente, no entraré en detalles sobre su vida personal que como otras muchas de genios más que reconocidos dejaron mucho que desear, pero hay que separar sus obras maestras en el arte del cine de las muchas chapuzas sucias que ha cometido en su quehacer íntimo.

La historia transcurre entre las atracciones de un parque temático de Coney Island en New York hacia la mitad del siglo pasado. Un matrimonio donde el marido mantiene viva la afición a la pesca y su esposa propone fantasías amorosas. El matrimonio se siente distante en su relación y pasados de rosca amorosa. Se toleran por los años que llevan juntos, pero con la nueva llegada de su hija todavía se va a enredar más la relación. Tras ese aspecto pálido que le da el color del atardecer se vislumbra una vida que pasa sin que ocurran grandes cosas, como la sensación de abandono, del tiempo perdido, de la insatisfacción. Todos ellos marcados en la cara de la protagonista que no encuentra un segundo de satisfacción. Ese tiempo que nunca volverá, incluso el presente se siente pesado, amargo de pasar. Todo ello lo cuenta un narrador, el salvavidas de la playa, desde lo alto de una peana de observación. Por allí pasa nuestra protagonista que intentará echarle los tejos al opuesto galán en bañador. Éste sigue a su rollo, se siente escritor y cuenta lo que sucede alrededor de sus pies. Esa noria que voltea al lado sin cesar es la propia vida que sube y baja, de sorpresas y penalidades de vaivén de paradas bruscas y arrancadas de caballo como la vida misma. Eso sucede en esa familia de currantes que buscan un lugar en la vida y no lo encuentran. Desesperados porque ven pasar el tiempo sobre sus carnes sin obtener a cambio una recompensa de satisfacción. Detrás de un fracaso amoroso llega una crisis personal.El tiovivo de la vida que da vueltas sin cesar sobre los mismos temas. En fin, quien disfrute con este tipo de director que es capaz de rodar una cinta por año sin que ninguna de ellas te defraude, pues supone una auténtica satisfacción.