viernes, 10 de mayo de 2019

The Miseducation




Título original The Miseducation of Cameron Post

Año                 2018

Duración         90 minutos

País                 Estados Unidos

Dirección         Desiree Akhavan

Guión              Desiree Akhavan, Cecilia Frugiuele

Música            Julián Wass

Fotografía       Ashley Connor

Reparto          Cloë Grace Morezt,Sasha Lane,

                       Forrest Gooddluck, John Gallagher

                       Jennifer Ehle, Quinn Shephard,

                        Dalton Harrod, Chistopher Dylan

La película "The Miseducation" de Desiree Akhavan se adentra en las indecisiones sexuales de una adolescente que, para que tenga una elección más acorde con la sociedad convencional, se la encierra en una residencia de corte católico.

 Allí se intentará desintoxicar de cualquier desviación homosexual. Ganadora del premio a la mejor película en el festival de Sundance 2018 y la plata de bronce del festival de Valladolid te engancha en las primeras tomas y ya no te suelta hasta el final. Sin embargo, hay momentos que resultan un tanto plomazo. El encierro en un centro de rehabilitación es inminente. El lugar es idílico, pero la comida de tarro también. La chica siente una soledad intensa, pues sus padres fallecieron hace años.

En definitiva, en ese infierno no se puede habitar





La reclusión se produce a partir de unas relaciones sexuales con otra chica. A primera vista ya se ve que la solución puede ser peor que dejarla como estaba, pues allí, dentro del centro, hay un ambiente de represión superior al de la calle. No se admite desviación alguna, es decir que de inicio se revisará todo lo que lleve en la maleta nada más entrar por la puerta y en el caso de encontrar una pista de desviación ya sea de música o algo que no entre en la mente de una fe cristiana se le requisará. Se pretende cambiar de sentimientos, de gustos, de forma de vivir, en una palabra cambiar los comportamientos naturales de un individuo y en este caso la sensibilidad de una chica adolescente. Es decir, generar una maquinaria personal de producir a una persona con unos determinados patrones establecidos. Pero en ese estado de adoctrinamiento, la condición humana sufrirá las consecuencias y lo más probable es que se rebote contra el sistema. Vemos enseguida que esa atracción religiosa impuesta por el centro está haciendo mella en la forma de ser de la chica. Todo lo que la rodea está plenamente hipnotizado por esa sumisión a Dios. Sin embargo, las apariencias engañan y ante tanta represión, lo que sucede es que los alumnos adolescentes se esconden para realzar aquellas tareas prohibidas como fumar y otros temas. Sigue en un tratamiento de choque sobre esa homosexualidad considerada por los sectarios como una enfermedad cuando la chica no lo tiene nada claro y lo único que quiere es acabar de definirse. Si se encuentra bien con una chica y se besan pues por qué no hacerlo. Consideran que son dudas de formación y que se puede salvar la situación por medio del castigo y el encierro. En fin, pues eso.

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