martes, 2 de julio de 2019

Rosalie Blum




Título original Rosalie Blum

Año                2015

Duración        97 minutos  

País               Francia

Director          Julien Rappeneau

Guión             Julien Rappeneau

Música           Julien Rappeneau

Fotografía       Pierre Cottereau

Reparto           Noemie Lvovsky, Kyan Khojandi,

                        Alice Isaaz, Anémone Philippe

                       Rebbot, Sara Giraudeau, Camille

                       Rutherford, Nicolás Bridet, Pierre

                       Diot, Matthias Van Khache, Gregoire

                       Oestermann, Jean Michel Lahmi.

Por descontado que una comedia es más complicada de realizar  que un drama. Hacer reír al espectador no es cosa fácil. Sin embargo esto no es excusa para lanzarte a la desesperada para montar una obra que carece de gracia.

"Rosalie Blum" de Julen Rappenaeu trata de un peluquero inmerso en una vida monótona. Es un individuo encuadrado en un medio rural donde tiene una clientela fija de siempre, vive al lado de su madre que está como un cencerro y sus amigos quieren encasquetarle una piba a toda costa, para que se olvide de un amor imposible que lo dejó un día. Es una de esas pelis que ves y la olvidas casi al mismo tiempo, pues se supone que estamos ante una comedia y no me ha sacado ni una risa.



El peluquero conoce el entorno palmo a palmo y no hay nada que le alegre la vida hasta que por las casualidades de la vida encuentra una chica, que nunca había visto y se decide espiar su vida sin asediar su espacio vital. No se sabe muy bien qué le atrae, pero espiarla se vuelve una obsesión: frecuentar los lugares que ella visita. No le hace nada tan solo la observa. Por lo tanto, el personaje persigue a su presa a cada paso que da, ya ha averiguado todo de ella. Su mundo se vuelve obsesivo y todo se desmorona a su alrededor. Sin embargo, tanta persecución alerta a la perseguidora que lo pone en conocimiento a una sobrina que a su vea espía a su espía.Ahora que ha sido descubierto por la protagonista se monta una red en contra del peluquero. El contraespionaje es mucho más sofisticado: fotos, mapa, lugares. Se sigue la pista como si se tratara de un asesino en serie. Inmiscuirse en la vida de los demás parece que mola mucho más que vivir la propia. Y cuando la complicidad llega a mucha más gente, entonces la historia se retuerce. Está contada de manera que encajan las piezas de las diferentes partes de los espías, primero sucede algo de un lado y luego la misma escena del otro. En fin, no tiene mucho más.

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