La profesora

Título original Ucitelka 

Año                 2016

Duración         102 minutos

País                 Eslovaquia

Director           Jan Hrebejk

Guión              Petr Jarchovski

Música            Michael Novinski

Fotografía       Martín Ziaran

Reparto           Zuzana Maurévy, Zuzana Konecna,

                       Csongor Kassai, Tamara Fischer

                       Martin Havelka, Eva Bandor,

                       Oliver Oswald, Peter Bebjak,

                       Richard Labuda, Ina Gogalová,

                       Monika Certezni, Peter Bartak

      

"La profesora" de Jan Hrebejk repasa  las peripecias de una profesora , María Drazdechova (interpretado por 

Zuzana Maurévy) en un colegio de Bratislava, en un régimen totalitario como era el comunista del los ochenta del siglo pasado. No se centra tanto en el sistema educativo de la docente sino en su poder y utilización del mecanismo dictador en beneficio propio fuera del ámbito escolar. El sistema corrupto le permite utilizar tanto a los alumnos como a sus respectivos padres con fines lucrativos. Así, por ejemplo, si un padre es reparador de electrodomésticos, pues si se le estropea uno en su casa, le hará llamar para que se lo solucione, o bien cuando quiere mantenerla limpia que los propios alumnos se la adecenten. Su poder sobre el entorno es desmedido y se realizará una reunión de padres para desautorizarla y expulsarla.

La cinta gira en torno a una reunión de padres que quiere decidir sobre el futuro de la nueva profesora que ha llegado al instituto. No es nada fácil tomar una decisión de ese calibre, porque el partido comunista la avala. En esas circunstancias, los padres se sienten intimidados y no saben cómo parar a esa intrusa que utiliza a los alumnos con amenazas y, al mismo tiempo, que ellos mismos son intimidados con un futuro de sus vidas un tanto incierto. Su poder pasa fuera de los límites del colegio y de las aulas. Así que considera que todos los que se mueven a su alrededor son sus siervos. Se siente poderosa con la hoz y el martillo como escuderos de sus despotismos. Mientras, los padres, agobiados hasta el extremo, no saben como quitarse de encima esa losa comunista. Por lo tanto,  quién tendrá la valentía de enfrentarse al aparato político comunista. El miedo a mostrar la libertad de expresión a abrir la boca para decir cuatro verdades se apodera de la situación. Aquellos que abandonaron el país y el sistema para abrirse las puertas a un mundo libre y progresar no son otra cosa que unos traidores, unos cobardes que abandonaron la patria. Por lo tanto, si te doblas al sistema, la propia profesora te conseguirá un trabajo y una estabilidad social.  En definitiva, se siente en la tristeza de los personajes el peso de la ley del aparato político que no les deja respirar. La cinta va de menos a más, con un inicio un tanto soporífero que si aguantas te va a enganchar.