"Mi hermano pequeño" de Leonor Serraille inicia su andadura de la misma manera que otras películas sociales: mujer de color de camino en autobús hacia el domicilio de un familiar en busca de un lugar mejor del que procede. Llega con la carga pesada de dos niños pequeños y en soledad.
No sabemos de su pasado, pero lo imaginamos: malos tratos o que su marido la ha abandonado o cualquier calamidad acaecida a una mujer que huye del pasado para enfrentarse a un presente con más futuro. Viene de Costa de Marfil con intención de iniciar una nueva vida. Sin embargo, a las primeras de cambio ya tiene un " moscardón" que intentará echarle los tejos, porque está de muy buen ver y no puede estar en soledad. Ella reniega y protesta de que enseguida se acerquen con intenciones sospechosas. Nunca salen bien esos acercamientos zalameros. La historia avanza con nuevos ligues, mientras la voz en "off" de su hijo va narrando los acontecimientos que van pasando.
Pasado el tiempo, la historia se decanta hacia ese hermano mayor que en principio era el centrado que se cuidaba de la familia, pero al final se descarría. Como siempre, esa familia será itinerante y los hombres dejarán siempre en la estacada a su madre. Al final, el hilo conductor se decanta por la trayectoria del hermano menor que intenta hacerse cargo de su hermano que acaba de dejar los estudios y divaga por las calles que será quien consiga llegar lejos y dar clases en un colegio. En fin, los tumbos que da una familia en busca de una estabilidad. El drama está servido.
Título original Un petit Frere
Año 2022
Duración 116 minutos
País Francia
Dirección Leonor Serraille
Guion Leonor Serraille
Fotografía Helene Louvant
Reparto Anabelle Lengronne, Ahmed Sylla,
Stephane Bak, Kenzo Sambin,
Laetilia Dosch, Jean Chistophe,
Thibaut Evrasd, Majd Mastoure,
Manon Clavel, Pascal Reneric,
Angelina Woreth, Manuel Lelievre,
Rafael Rajabian.
Una madre joven con don dos hijos llegados de África quiere iniciar una nueva vida entregada a sus hijos y a su trabajo. No pide otra cosa. Esa mujer se siente suficientemente libre para rechazar a un hombre que le obliga a ir con ella como a ligar con aquel que le viene en gana en otro momento. Los deseos sexuales los satisfará con el hombre que ella quiera. Su forma de vida liberal de salidas nocturnas y desmadre no acaba de convencer a los parientes con quien comparte piso. Así, si no sigue las consignas establecidas en la casa, mejor será que se busque otro lugar para dormir. Sin embargo, la joven madre no atenderá a consignas y seguirá con sus farras nocturnas. Por lo tanto, nada de juntarse con aquel hombre que le proponían sus parientes y sigue los designios de su corazón. Por eso, la echan de casa y se marcha con sus hijos al lugar de ese hombre que acaba de conocer. Pasados los años, la madre sigue en el mismo plan y el hermano mayor debe ocuparse del pequeño porque la madre solo se le ve el pelo durante los fines de semana. Ahora, por un lado, le toca el turno contar las peripecias del hijo mayor ya en la adolescencia y enamoradizo, pero ante los fracasos amorosos de su madre no acaba de saber qué hacer con su vida. Esa forma de pensar existencialista le lleva a comportarse como su madre: farra y ligues. Posteriormente, por otro lado, le toca contar su vida al hermano menor que atiende a su hermano que acaba de dejar los estudios y necesita ayuda, porque su madre y el nuevo marido que era el que la pretendía inicialmente, no se llevan nada bien. La rueda de la familia continúa en marcha y ahora le toca al pequeño contar su experiencia y el camino que debe tomar. Él ,que era quien menos posibilidades de progresar tenía en la vida, acaba alcanzando el triunfo porque llega a ser profesor. En definitiva, la cinta sigue una ruta familiar del devenir que les sucede en un momento determinado. Trayectoria que será dispar y cada cual tomará un camino que los separará definitivamente.
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